- Apaga todo lo que no estés utilizando.
- Acostúmbrate a apagar las luces si sales de las habitaciones.
- Utiliza electrodomésticos Clase A.
- Cuando apagas tus equipos usando el mando a distancia, el piloto que queda encendido tiene un consumo de hasta un 15%.
- Procura utilizar el lavavajillas cuando esté completamente lleno. A media carga, usa los programas cortos o económicos.
- Plancha grandes cantidades de ropa de una vez.
- Siempre que puedas utiliza ollas a presión súper rápidas: sin apenas pérdidas de vapor durante la cocción, consumen menos energía y ahorran mucho tiempo.
- Racionaliza el consumo del agua. No dejes los grifos abiertos inútilmente (por ejemplo: en el lavado, afeitado, y cepillado de dientes).
- Deja enfriar los alimentos calientes al aire libre antes de meterlos en la nevera.
- Apaga el horno un poco antes de finalizar la cocción: el calor residual será suficiente para acabar el proceso.
- Una temperatura de 20ºC es suficiente para mantener el confort de una vivienda. En los dormitorios se puede rebajar entre 3 y 5ºC
- Una ducha consume del orden de 4 veces menos agua y energía que un baño. Tenlo en cuenta.